En su estudio el perito manifiesta que por dos factores fundamentales, la cercanía y accesibilidad de un mercado altamente competitivo representado por el existente en el Estado de California de los Estados Unidos de Norteamérica y por la lejanía de la zona, respecto de los centros de producción nacionales para el abastecimiento de materias primas y bienes de consumo final, los cuales, en promedio reflejan un precio (sin impuesto) por arriba o similares a los ofertados en el Estado de California, EUA. El mercado regional fronterizo, compite todos los días con el mercado internacional, y tener políticas fiscales con alto gravamen, dificultan e inhiben el desempeño de la economía. Esto es lo que fundamentalmente, justifica o explica la necesidad de una política fiscal diferente, a la de otras regiones económicas del país.
En su análisis puede advertirse que existen tres razones fundamentales para otorgar tratamientos fiscales especiales a la frontera: La primera, por la necesidad de retención de consumidores nacionales en los comercios locales, esto se logra con mejores precios, mejor calidad y servicios; la Segunda, por el flujo migratorio que arriban a la frontera año con año, esto es, Baja California capta más de 120 mil personas (casi 30,000 familias) que demandan empleo, vivienda, servicios públicos, educación, servicios de salud y atención ciudadana; la Tercera, para mantener la planta productiva del Estado, como son la producción agrícola, ganadera, industrial, comercial, de servicios y turismo, se debe ser competitivo en precios, calidad y servicio, pero aquí se compite con California, que es considerada la quinta economía a nivel mundial, que tiene un régimen especial de importaciones de todo el mundo y poseen los adelantos tecnológicos internacionales siempre en primer lugar.
Manifestó también que no es posible mantener captaciones de más de $2000 millones de dólares anuales en inversión extranjera directa en la entidad, que a su vez contribuyen a generar más de 40 mil empleos por año; también, se requiere estimular la creación de micros y pequeñas empresas que a su vez son el principal motor de la generación de empleo y autoempleo; por último, el mantener un tratamiento fiscal especial en la frontera, ha permitido que haya una cobertura educativa más que aceptable en la región, que los servicios públicos básicos como agua potable, alcantarillado sanitario y electricidad mantengan una coberturas mayores al 95% en agua potable y electricidad y más de un 80% en alcantarillado sanitario. La Universidad Autónoma de Baja California, tiene una cobertura de más de 60,000 estudiantes en los últimos años, lo cual ninguna universidad regional lo ha logrado. En suma, se tiene mayor calidad de vida en la frontera cuando hay condiciones que permitan competir con el vecino estado de California.